lunes, 21 de abril de 2008

No me hagás

"No me hagás renegar", me decía cuando yo estaba a punto de acometer alguna travesura.

Esta expresión aparecía en lo que podríamos llamar la fase 1 de la amenaza, caracterizada por la ausencia de improperios.

Fase breve, por cierto.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo siempre le digo a mis hijas "no me hagan renegar"

bloomy dijo...

Sí!